Rabinos en Oro Verde: ya se encuentran fiscalizando en el frigorífico Alberdi

Locales
07/07/2020 1006 vistas

Leonardo Lequio, presidente del Frigorífico Alberdi, describió la expectativa que se había generado alrededor de la llegada de un grupo de rabinos israelíes a la ciudad de Oro Verde, para fiscalizar el proceso de faena de carne kosher.

En una entrevista con la Agencia de Noticias AJN, el empresario argentino contó que el frigorífico que preside comenzó con la exportación de carne kosher hace dos años cuando hizo “una inversión bastante importante de la habilitación para la faena con el rito kosher”. “Se instaló un saladero, el más grande del país, se colocaron todos los equipos del cajón de noqueo que exigía la normativa del rabinato (de Israel) y se comenzó con la operatoria. Fue la primera vez que la provincia de Entre Ríos ingresaba con carne al mercado de Israel”, comentó.

El Presidente explicó que “la producción de carne kosher nace porque en el rubro de la carne se intenta siempre una integración que genere el mayor valor agregado posible”. “Cuando se dispone de todos los mercados de mejor valor para la carne es cuando se puede disponer del mejor precio para defender el mejor valor del novillo en el mercado. Entonces teniendo la venta de una parte del animal a Israel, otra parte a China, otra parte a Estados Unidos y otra parte a Europa, se logra una integración más importante y necesaria para continuar con el negocio”, precisó.

Lequio indicó que si bien en números porcentuales no es tan importante la carne kosher, se estima que rinde el 7 por ciento de la producción cárnica argentina, para el Frigorífico Alberdi la venta de carne kosher significa el 30 por ciento de las exportaciones.

“Este año por efecto de la pandemia del COVID-19 el negocio corría riesgos de poder producir carne para Israel y entonces se trabajó mucho desde las cámaras que reúne a los frigoríficos con Cancillería y el Ministerio de Salud para lograr poder traer un vuelo especial con los rabinos y organizar el proceso de sacrificio”, resumió el empresario para graficar las gestiones que se realizaron para traer a la Argentina a 98 religiosos procedentes de Tel Aviv para certificar el proceso en seis de los once frigoríficos que trabajan con bovino kosher.

“Gracias a las gestiones logramos traer un vuelo directo de Tel Aviv a Buenos Aires y después de más de 60 años. De paso ayudo a traer algunos repatriados que habían quedado en Israel”, comentó Lequio con orgullo.

Los rabinos enviados para fiscalizar la faena llegaron a la ciudad y estuvieron 14 días en cuarentena para cumplir con los protocolos establecidos por la autoridades sanitarias argentinas. “Cumplida la cuarentena, el lunes pasado comenzamos con la faena. Son 18 personas que están en la planta, algunos vinieron de Israel, algunos vinieron de Buenos Aires que fueron aprobado por el rabinato para trabajar en el rubro”, señaló.

“El proceso de faena de la carne kosher se inicia con un rito de matanza donde interviene un rabino especializado y se realiza con sable especializado. Luego se hace un desangrado especial según las normas de la Torá. Posteriormente se hace un control, se revisa que el estomago y los pulmones del animal también estén sanos. Cumplidos estos requisitos queda aprobado para que el pecho del animal sea apto para procesarlo como carne kosher”, explico Lequio. El proceso se completa con el lavado y salado de la carne para continuar con el envasado al vacío y congelado, todo bajo la mirada atenta de los rabinos.

Lequio contó que comió carne kosher y opinó que “a la gente que no pertenece a la congregación no le cambia en nada, la puede consumir sin ningún tipo de problema”. “A lo mejor, la carne kosher tiene más parámetros de control que otras carnes. Además el proceso de salado hace una curación y el sangrado especial también es importante. No hay ningún riesgo en comer ese tipo de carne”, agregó.

En este contexto, el empresario indicó que si bien no se puede hablar de un aumento en el consumo de la carne kosher, menos aún en este marco de pandemia, lo que si pudo confirmar es que en la Argentina “se está procesando un poco más” este tipo de faena porque “hay más plantas”. Incluso en el Frigorífico Alberdi se generaron más de cien puestos de trabajo.

Consultado sobre el efecto que generó la presencia de los rabinos en Oro Verde, el empresario comentó esta oportunidad, por la cuarentena dispuesta a nivel nacional, no hubo tanto revuelo. “Las primeras temporadas, la presencia de los rabinos cambió el paisaje porque había personas vestidas de negro, con la barba y los sombreros. Pero siempre la gente los ha recibido muy bien, con mucha expectativa”, comentó.

Respecto de cómo se gestó el histórico vuelo que trajo a los rabinos israelíes, Lequio destacó que “la Cancillería argentina participó activamente como también el consorcio de exportadores y la Unión Cárnica Argentina”. Además rescató la intervención del embajador argentino en Israel, Sergio Urribarri, ex gobernador de la provincia, que también se sumó para conseguir la llegada de los rabinos en este contexto de pandemia.

Lequio contó que estuvo el año pasado, en Israel, por razones de negocio. “La verdad que quede sorprendido por el crecimiento de un país en muy poco tiempo”. “Me gusto mucho, me gustaron mucho las playas. Fui esperando ver algún ruido (por el histórico conflicto con los palestinos) pero lo que se ve en la televisión no es tan así. Por donde anduve por lo menos no, fue toda una aventura y encontré gente con quien hacer negocios”, transmitió.

El empresario explicó que los rabinos israelíes terminarán su tarea en la Argentina para antes del Año Nuevo Judío (Rosh Hashaná), pero finalmente manifestó su deseo de que se mantengan las relaciones con Israel, pero sobre todo que se establezcan los vuelos directos desde Tel Aviv a Buenos Aires.

(AJN)